TriCross de Guadalest

Como ya sabéis, el triatlón de Santa Pola tuvo sabor agri-dulce para Fran, no pudo terminarlo por un inoportuno pinchazo. Dicen que un clavo saca otro clavo. Así nos cuenta Fran su participación en el TriCros de Guadalets:

Después del pinchazo de la semana pasada en el triatlón de Santa Pola y tras dos días en shock, Juanki me invita a hacer el triatlón de Guadalest, de montaña, y así de esa forma quitarme la espinita y la cara  de sapo que se me quedo.

Como no hay locura sin compañeros de Cluss decido liar a Ignacio que se que está afectado como yo, para que me acompañe y apoye en el duro reto y como no... mis niñas Luisa, laEspe y Silvia deciden unirse y no dejarnos solos, ellas tan solidarias, tan locas!!!!

Foto cortesía de Foto Deporte

Así que allí nos plantamos con nuestro afectado, sufridor y fotógrafo Juanki, dispuestos a comernos la montaña y lo que se ponga por delante, que decir que la dureza de las pruebas estaba a la vista ya que eran triatlón de montaña, ¡¡ahí es na!! para empezar una organización pésima y casi inexistente, la prueba comienza casi con tres cuartos de hora de retraso, para colmo el pantano tenía oleaje!!!

Luisa sale diez minutos antes con las chicas y lo pasa bastante mal, ya que a mitad de trayecto tienes que salir del agua y volver a meterte y es muy difícil de orientarte (entre otras por la falta de referentes) y para colmo el tramo final te arrastra a la presa.

A Ignacio le da un tirón muscular en el gemelo y lo pasa mal también, yo la primera parte la hago bien aunque notas que el agua del pantano no te hace flotar, en la parte final lo paso fatal, me arrastra la corriente hacia abajo y no avanzo, ¡¡una odisea chicos!!

Bueno ya estamos en el segmento bici, primera parte bien, a partir del km 3 empiezan unas cuestas endemoniadas que es imposible de subir sin pararte, ¡¡¡ríete de la torre del moro!!!, llegamos a la parte de senderos escarpados y nos encontramos a Silvia que se había caído y llevaba la rodilla magullada.

La siguiente parte bajadas por caminos de piedras que si se te va la bici acabas por un barranco, tienes que bajar tirando de frenos, por el camino compañeros con pinchazos, bicis rotas y hasta uno con la bicicleta al hombro a 6km  de la meta, la parte final más subida, llegamos desfondados, hacemos la transición de bici a carrera y allí esta Juanki, Luisa y laEspe y poca gente mas.

Empezamos a correr y se notan las piernas pesadas y sobre todo por que son todo cuestas por la montañas y sendas para arriba para arriba; a dos kilómetros de la meta nos encontramos con un muchacho lesionado y como somos un Cluss muy solidario lo acogemos en nuestro seno y nos acompaña hasta la parte final; en esta parte del triatlón notamos las lumbares súper cargadas; la parte final, épica y mítica acaba subiendo a lo mas alto de Guadalest, pasando incluso por dentro de la casa consistorial, el arco está en lo más alto del pueblo. ¡¡¡Ignacio, lo hemos conseguido... SOMOS TRIATLETAS y de montaña!!!

Poco después aparece laEspe escalera para arriba y con una cara de felicidad increíble, había adelantado a cuatro corredores, ya en la plaza del pueblo nos abrazamos y besamos como es sana costumbre en este nuestro Cluss, un Cluss que apoya incondicionalmente a cada uno de sus miembros y te hacen sentir especial, esta aventura no habría sido posible sin el apoyo de Juanki, Ignacio, Luisa, Silvia y laEspe que siempre creyeron en mi y en que un mal día lo tiene cualquiera!!!

Y con una estupenda comida regada con mucha cerveza y con vistas al valle acaba nuestra aventura, adiós Guadalest...

¿¿¿Hasta siempre????