Preparando el Sulayr

DE ELCHE A SANTA POLA (no hay calor)

El mes de Junio ha pasado sin pena ni gloria, después de terminar el cross del Marjal estaba tan cansada que no me lo pensé ni un segundo al decidir, que hasta la subida a la Magdalena no me volvía a poner un dorsal. Lo que creía que sería capaz de hacer era salir a entrenar con normalidad pues nada, que ni eso, mis piernas y mi cabeza decidieron por mí, así que entre el trabajo y mis pocas ganas como mucho este mes habré salido unas seis veces y nunca he hecho más de 10 kms. Pero bueno, ahí  estaba el Jefe intentando que no me oxidase y no se le ocurre otra cosa que lanzarme un reto, como me conoce, sabía perfectamente que yo se lo recogería. Nada que me propone hacer la vuelta al Baix Vinalopó, le pregunto que cuánto sería eso. Entre 130 y 140 kms, me responde. Y no crees que con 50 ya iríamos bien, le rebato. Después de negociar un poco decidimos que con más o menos 55 ya íbamos más que sobrados, y a ritmo muy suave, vamos que si no se corría no pasaba nada. Así que el día de San Pedro estábamos los dos preparados a las 7:45 con nuestras mochilas, la mía cargada de dos litros de agua, dos bocadillos, alguna barrita energética y chucherías varias. Y salimos dirección al Pantano donde nos encontramos a un grupo de ciclistas haciendo piruetas para bajar de la Senda de los Chopos.

Por cierto, si eres de Elche no dejes de visitar el Pantano que está espectacular.

De ahí le dimos la vuelta al Castelar, Racó Morera, subimos al Cau a saludar y darle los buenos días al Tio Pere, cogimos la Senda de los Cazadores para enlazar con el camino viejo de Monforte, seguimos el sendero del Sit, que nos llevaría al camí de les Canteres, cruzamos la autovía por debajo, seguimos hasta la partida de Santa Ana, Serra Llarga.... Si eres ciclista ten cuidado que varios senderos de esa zona están llenos de clavos de zapatero, nosotros íbamos trotando y algunos nos clavamos.

Total que como el que no quiere la cosa a las 14:30h estábamos en Urbanova, de ahí a Arenales, aquí el Jefe no pudo más y se dio un baño, la verdad es que el calor ya apretaba.

En los Arenales del Sol nos fuimos en busca de una tienda para repostar agua y comprar una cerveza, que cayó mientras estábamos sentados en un banco comiéndonos el último bocadillo.

Retomamos nuestro camino, y me doy cuenta que las piernas me flojean supongo que la cerveza tiene algo que ver le digo al Jefe.

Al llegar al cruce de la carretera que une Arenales con Santa Pola, el Jefe me pregunta, ¿qué quieres playa o sierra? y yo muy valiente le contesto, sierra, total que cuestecica de Gran Alacant para arriba sin remordimientos.

En fin que bajamos a Santa Pola por la Torre del Moro y de ahí al Varadero donde teníamos el coche. Bañito, merienda para recobrar fuerzas y paseo hasta el centro para estar con l@s compañer@s que corrían los primeros 10 kms nocturnos. Pero eso dejo que lo cuente otra.

 El Publireportaje