EL ESPÍRITU MARUJIL
EN LA MEDIA ROCK & ROLL MARATÓN-MADRID
¡ HOLA AMIGOS ¡ éste finde ha sido bastante movidito,
estuvimos en Madrid para celebrar la ROCK & ROLL MARATHON, que estrenaba su
primera ½ Maratón a parte de la misma y de los 10 km., así que mi chico me
apuntó a la media. Esta vez me fui en el coche con Ana, Natalia y Emilio que se
apuntaron a última hora para hacernos compañía, ya que tanto Alberto y Fausto
(el marido de Ana) habían salido el domingo anterior con el reto del 1º
Ultramaratón Solidario Alicante-Madrid, no voy a enrollarme con la llegada de
ellos a la recogida de dorsales, los lloros, abrazos etc. todo eso ya lo
podréis leer en sus blogs correspondientes, yo paso a contaros el “triunfo” del
espíritu Marujil en la media de Madrid Rock & Roll, y digo eso porque hice
una carrera fantástica y no por el tiempo que para mí era lo de menos (siempre que me lo den, claro) lo
importante es disfrutar lo más posible
en ella y eso es lo que me sucedió en Madrid y fue gracias a Mónica. Habíamos quedado a cenar con cuatro de los
magníficos Alberto , Fausto, Manolo y Paco,
nosotras y los amigos incondicionales que son Paco Zaragoza “el Jefe” y
Ángela la “Presi” de las Marujas, también había llamado a mi sobrina María que
vive en Madrid y siempre que voy me gusta verla, quedamos que vendría también a
cenar y trajo una amiga que precisamente quería “debutar” en la media, yo le
dije que iba a ir despacio que si quería venirse conmigo no había problema si
aguantaba mi ritmo de
tortuguita, me dijo que sí que ella no entrenaba mucho
(corriendo, pues hace bici y natación) y que no pensaba hacer ninguna marca, le
dije el lugar donde habíamos quedado con nuestros amigos y que no le sería muy
difícil encontrarnos pues solo tenía que buscar una bandera de España arriba de
una Sombrilla, la localizó en pocos minutos y quedamos en ir juntas, yo no me
las tenía todas conmigo de que me aguantaran pues se presentó con otra amiga
llamada Luz, las dos jóvenes y con ganas, y contra eso, mi ritmo no iba a poder
competir, pero no fue así, fuimos juntas y charlando animádamente, a los pocos kms. Luz empezó a quejarse del
tobillo y Mónica se quejaba un poco de
la rodilla, seguíamos charlando y yo dándoles la “paliza” con las carreras y
las marujas, los kms. pasaban sin darnos
cuenta, pero sobre el km. 8 Luz se quedó pues el tobillo por mucho réflex que
le pusieron no daba para más, así que con mucha pena tuvimos que dejarla y
seguimos nosotras, como el ritmo era
desahogado íbamos charlando dándoles la mano a todos los chiquillos que la
ofrecían y conforme pasaban los kms. estábamos más animadas (a pesar de su
rodilla) así que de vez en cuanto cantábamos el estribillo de una canción que
dice así : “ VAMOS PÁ MADRID…SIN REMORDIMIENTOS, LA , LA , LA”, la gente se nos
quedaba mirando, a mitad de carreras vimos una cámara de televisión con un
reportero entrevistando a corredores, vimos que terminaba y fuimos a por él a
“chupar cámara” yo le enseñé mi camiseta nueva de las MARUJAS y nos hizo un
comentario sobre la tragedia de Boston , le enseñé el lazito negro que llevaba
en mi camiseta y le dije que los llevábamos en el corazón que la carrera iba
por ellos. Los kms, seguían y nosotras cada vez más animadas, se me fue
contagiando la alegría y la juventud de mi compañera y a partir del 15 en cada cartel
anunciando el km. teníamos que cantar el estribillo, la gente nos aplaudía con más gana y nos daba más ánimos, ya los kms. no pasaban
“volaban” a pesar de que la rodilla de mi compañera cada vez le dolía más, pero
lo estaba pasando tan bien (al igual que yo) que el dolor pasaba a un segundo
plano, llegamos a un punto desde donde divisamos la Puerta de Alcalá y entonces
ya fue la alegría total, a parte del estribillo íbamos cantando “MIRALA,
MIRALA, MIRALA… LA PUERTA DE ALCALÁ”,
LA META ALLÍ ESTÁ, MIRALA,
MIRALA,MIRALA, bueno, el escándalo ya era demasiado, una pareja que pasamos y
nos metimos con ellos dándoles ánimos nos dijeron, “oye, no vendréis todo el
camino así verdad “ y les dijimos que no que era por la alegría de ver que estábamos
ya muy cerca, mi compañera terminó como lo que es UNA CAMPEONA, aguantando su
dolor y sin dejar de sonreír y transmitirme su alegría y sus ganas, llegamos a
la meta eufóricas, cantando, gritando y bailando, nos era igual que el reloj marcara
lo que quisiera, todavía nos sobró tiempo, pero lo pasamos genial, al final de
la meta nos esperaba mi sobrina María y de vuelta cuando le íbamos contando a
ella la carrera y lo del estribillo coincidió que al otro lado de la valla
estaban estirando la pareja que habíamos pasado y al oírnos nos dijo el chico “
¡pero todavía estáis cantando ¡”, les
dirigimos nuestra mejor sonrisa, les dimos la enhorabuena por terminar y a ver
si nos veíamos el próximo año.
Bueno, ésta vez casi me sale un libro, y no es
nada con todo lo que hicimos, pero he intentado resumirlo lo más posible, gracias
por tu compañía Moni . BESOS TOD@S y
hasta la próxima.
El publireportaje
El publireportaje