Despidiendo 2011 A to Trapo

Siempre hemos pasado a sus pies y nunca se nos había ocurrido subir a su cima. El Cabeço d’Or es una sierra cuyo punto más alto alcanza los 1207 msnm en su parte sur.

 Los marineros de El Campello, la Vila o Santa Pola han utilizado tradicionalmente los relieves del Cabeço o del Maigmo como referencias terrestres que les permitían triangular y localizar los puntos marítimos. Estos marineros han desarrollado sus propias denominaciones. Al Cabeço lo llamaban “L’Home” (El hombre), es por ello que un espolón se llama “L’Homenet”. Desde el mar se observa como un elegante y distintivo mojón de resonancias masculinas. Al Maigmó lo llamaban “Puig Coronat”, o cima con corona, debido al pequeño sombrero que adorna la cumbre.

Las tres crestas más distintivas de la sierra están alineadas en la ladera oeste. La primera corona las Cuevas de Canelobre, la siguiente se llama Racó Caldero (entre ambas está el canal de L’homenet) y por último la Cresta del Ase, cuya forma se asemeja a la de un saurio.

Lo que más me impacta de esta sierra es su aspecto geológico. Investigando un poco resulta que al pisar la cima del Cabeço, estamos pisando un estrato geológico jurásico. En Alicante sólo hay tres: el Albir, el Puig Campana y el Cabeço.

¿De donde viene el nombre de Cabezón de Oro o Cabeço d’Or?. Posibles respuestas:

Primero: debido a su valor económico cuando las minas de hierro estaban activas. En este caso, el oro es el hierro.

Segunda: puede ser que el “D’Or”, provenga de un término prerromano utilizado para designar el agua: “Ur”. Es sabido que existen muchas fuentes minerales de Aigües. En este caso, el oro es el agua.

Tercera: la sierra en la puesta de sol adquiere un tono rojizo debido a los minerales que contiene. En este caso, el oro es la luz.

Cuarta: posiblemente exista algún tesoro por allí escondido, quien sabe. En este caso el oro es el deseo de encontrarlo.

Hoy, gracias a la invitación de la gente de A to Trapo, hemos subido al Cabeço a despedir el año. Una ascensión suave, lectura de un poema y brindis con uvas incluido y como siempre, cerveza al final.

Seguro que volveremos.

Las fotos: