Cuando el Jefe nos propuso ir al Infierno casi le damos con la escoba, menos mal que rectificó a tiempo: No, no, al Infierno no, al Barranco del Infierno. Venga, vale; convocamos rápidamente y entre Marujas y afectados hemos completado dos coches y para Fleix que nos hemos ido. La Maruja Virtual, nuestra "Mari Pili", esa que se empeña siempre que "demos la vuelta donde esté permitido" por acortar un poco el recorrido nos lleva hasta Murla, un poco raro nos parecía, pero donde esté la tecnología... acabamos preguntando a una viejecilla que estaba barriendo la calle: "sí, sí esta tarde bous" nos contesta, ¿pero señora vamos bien a Fleix?, "sí, sí está tarde bous" nos dice otra vez metiendo la cabeza por la ventanilla, así que la Mari Geli dialoga con la Mari Pili, mejor damos la vuelta y nos vamos hasta Orba.
Una vez en Fleix, perdemos a dos Marujas, mojando magdalenas en un cortado las encontramos. Ya todos juntos comenzamos la caminata. Y como no podía ser de otra manera el "ascensor" estaba estropeado y nos hemos metido entre pecho y espalda más de 6000 escalones, ¡que la Mari Bego perdió la cuenta en 6003!. Un poquito hartitas estábamos ya.
Menos mal que el Jefe se ha portado y ha conseguido, comedor al aire libre
y un jacuzzi para recuperar, ¡todo eso sin aumentar el precio de la inscripción!
Como siempre terminamos hidratándonos con isotónica a base de cebada y para los más "cansaetes" un café en Casa Aleluya, en Jalón; quien por cierto, sigue diciendo eso de "Aleluya, aleluya, cada uno con la suya" (lo conocimos hace 30 años y el tio sigue "casi igual" que entonces, ¿será el vino?) al mismo tiempo que se pone morao realizando su pequeña actuación con un porrón de vino.
Menos mal que el Jefe se ha portado y ha conseguido, comedor al aire libre
y un jacuzzi para recuperar, ¡todo eso sin aumentar el precio de la inscripción!
Como siempre terminamos hidratándonos con isotónica a base de cebada y para los más "cansaetes" un café en Casa Aleluya, en Jalón; quien por cierto, sigue diciendo eso de "Aleluya, aleluya, cada uno con la suya" (lo conocimos hace 30 años y el tio sigue "casi igual" que entonces, ¿será el vino?) al mismo tiempo que se pone morao realizando su pequeña actuación con un porrón de vino.
2 comentarios:
Bonitas comparaciones, el ascensor, el comedor, el spa y el isotonico. Algun dia al final os vais a perderrrrrr. Un saludico.
Paco, gracias por tus comentarios, pero como en realidad nos da igual donde ir, nunca nos perderemos.
Un saludico.
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